Como ya sabíamos los perros, el animal que mejor se adapta a la sociabilidad del ser humano eran los animales más utilizados en terapias. Sin embargo, cada vez com más frecuencia los perros son entrenados para convertirse en parte de personal sanitario. Gracias a que muchas de sus capacidades son más agudas que las de los humanos los perros contribuyen a mejorar la vida de enfermos como las personas que sufren síndrome de Down, Alzheimer, autismo, problemas con los niveles de glucosa, epilépticos e incapacitados físicos.
Las razas más utilizadas son el labrador, el jack russell y el boyero de Berna elegidos debido a su fuerza e inteligencia, pero previamente estos animales con sometidos a 4 meses de entrenamientos. Después el perro debe realizar 8.500 repeticiones correctas de esta forma al irse con un paciente sabe lo que deben hacer y a cambio recibe una golosina de recompensa.
De esta forma los Jack Russell se anticipan a los cambios drásticos de glucosa detectando con su fino olfato el isopreno, una sustancia que aparece cuando los niveles de glucosa suben o bajan en el organismo. Gracias a esto pueden avisar al paciente 30 minutos antes de que se produzca el cambio. Esta raza además es la ideal para ser acompañante de personas que sufran epilepsia, cuando detecta una posible crisis acerca las medicinas a su paciente y le advierte de tomar el tratamiento.
Los labradores se entrenan preferiblemente para asistir a incapacitados físicos. En situaciones de emergencia pulsa un botón que pone en contacto a su dueño con asistencia médica, acerca lleves, medicinas y abre puertas.
EL boyero de Berna debido a su corpulencia es ideal para niños con autismo. Este asistente lleva picotearías para que el niño pueda comunicarse y además permite una mayor independencia de estos niños ya que conocen al detalle las calles que recorren con sus pacientes y gracias a esto pueden salir a la calle sin otra compañía sin peligro de perderse ya que con sus 50 Kg y atada a la cintura del niño es capaz de frenar su rumbo y coger el correcto.
Estos animales perfectamente formados para dar una asistencia eficaz y continua a sus pacientes resulta una alternativa fiable para las personas que la necesitan además de ser más asequible ya que en España nos podemos hacer con uno de estos ejemplares por 350€ cada seis meses.
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